En la playa de Barra Salada, un rincón paradisíaco de El Salvador, vive y trabaja Andrea, una madre de dos hijos que ha encontrado en el Lali Beach Hotel un refugio y una oportunidad para transformar su vida.
La historia de Andrea es un testimonio de lucha y superación, un recordatorio de que con determinación y esfuerzo, podemos superar cualquier obstáculo.
Después de enfrentar tiempos difíciles y caer en la depresión, Andrea se dio cuenta de que necesitaba hacer un cambio en su vida.

Buscando una oportunidad para salir adelante y darle un futuro mejor a sus hijos, encontró en el Lali Beach Hotel un lugar donde no solo podría trabajar, sino también encontrar apoyo y una nueva familia.
«El hotel me ha dado la oportunidad de superarme económicamente y de darle a mis hijos la vida que se merecen», dice Andrea con una sonrisa. «Pero más que eso, me ha dado una familia. Mis compañeros de trabajo son como hermanos para mí, siempre están ahí para apoyarme y motivarme a seguir adelante».

Andrea es un ejemplo de madre luchadora que se niega a rendirse ante la adversidad. A pesar de los tiempos difíciles, ha sobresalido y ha luchado para sacar a sus hijos adelante.
Su historia es un recordatorio de que con determinación y esfuerzo, podemos superar cualquier obstáculo y alcanzar nuestros sueños.
El Lali Beach Hotel, ubicado en la zona rural de Barra Salada, ha sido un motor de desarrollo para la comunidad, generando empleo y oportunidades de crecimiento para las familias que viven allí.
Andrea es un ejemplo de cómo el hotel está contribuyendo a mejorar la calidad de vida de las personas en la zona.

«Me siento orgullosa de ser parte del equipo del Lali Beach Hotel«, dice Andrea. «Sabemos que estamos haciendo una diferencia en la vida de las personas y eso nos motiva a seguir adelante». Cada huésped que nos visita nos brinda la oportunidad que conozca nuestro deseo de servirle y que pueda no solo de disfrutar de un día sol y arena sino que lleve consigo la alegría y sonrisas que día con día preparo para ellos, nos menciona. Ahora mi propósito es con los huéspedes que vienen es compartirles un poco de mi felicidad.
Andrea dice, que los tiempos difíciles solo nos ayudaban a encontrar las fuerzas ocultas en nuestro corazón y mente.
